17.6.06

El mimado niño gordito

Resulta que el niño gordito del que tanto se escribe porque, tontos no somos y ojos no nos faltan, está más rellenito que hace un tiempo, cuando galopaba cual alegre gacela por los pastos del Camp Nou. Cuando tanto se cuestiona su físico será por algo.
Ahora llega el Mundial y tiene problemas en los pies, le dan mareos... ¡por estrés! Ronaldo, un hombre que lo ha ganado todo ¡tiene estrés! ¿Le puede la presión? Quizás porque un futbolista de su estilo se resienta cuando su jornada laboral diaria aumenta de tres a seis horas (la de un obrero no baja de ocho). Un futbolista de su talla y madurez tiene todo el derecho del mundo a ponerse enfermo, pero lo del estrés suena a cachondeo. Además tiene un precedente de juerga discotequera de escándalo. Y cuando lleva ya un partido jugado en el que no vio puerta. Después llega un periodista que le pregunta insistentemente por sus problemas de salud durante su estancia en Alemania, se molesta y le llama estúpido, como si no costara. El caso es que su compañero Emerson reconoce que "hay que dejar de tratar a Ronaldo como si fuera un niño". Razón tiene, pero su conducta sigue siendo la de un chiquillo juergas, multimillonario, mimado por la prensa, al que nunca le han faltado chicas guapas y al que le gusta jugar a hacer que se casa. Es un crío de 30 años del que Parreira espera que marque en lo que resta de Mundial.